8:30 PM. Centro de Monterrey.
Caía una ligera lluvia, el pavimento estaba muy resbaladizo, las calles solas, heladas y a lo lejos sólo se escuchaban sirenas. Apenas podía caminar de lo entumida que estaba pues la llovizna había hecho su trabajo. Antes de cruzar el semáforo, recordé aquel hombre que hace tiempo veía camino al trabajo. ¡Entonces tuve una idea! sin pensarlo me apresure para comprarle algo que pudiera mantenerlo alejado del frió por un momento. Read the Post Página 3 de 365.